EL DESPROPÓSITO
MUNICIPAL
En la calle Pintor
Gassent de Valencia Capital, frente al Poli-deportivo de la Fuente
San Luis y haciendo esquina con el Colegio Santo Caliz, existen dos
fincas de 15 pisos, una en cada punta, lindando con la calle Hermanos
Maristas, y la que se adentra más, con la calle Paco Pierrá.
Frente a estas dos
fincas, existe un paseo precioso y varios jardines. Hay bancos para
que los vecinos dialoguen o los mayores descansen. Pues bien delante
de la fachada de la finca que está entre Pintor Gassent y Paco
Pierra, rodeando el perímetro de lo que debería ser un jardín de
10 x 16 metros, con alambres tejidos de un metro de alto, vemos
absortos, que está todo vallado. Les preguntamos a los trabajadores
(del Ayuntamiento) que estaban haciendo y nos contestan que es un
lugar para que los “perros del barrio hagan sus necesidades” ( el
que autorizó este despropósito, o no tuvo nunca un perro o es un
descerebrado, porque un perro CAGA DONDE LE VANGAN LAS GANAS, por eso
Ustedes obligaron a los dueños de los perros a llevar Papel o
Plástico recogedor y de no
hacerlo, los MULTABAN.
Pero
lo más sangrante de todo es que, de la valla lateral del “cagadero”
a la pared de la finca donde están los balcones, solo hay un metro
ochenta. Resumiendo,
UNA CHAPUSA QUE ATRAERÁ A
LAS MOSCAS, una parte de los 60 pisos de la finca gastando más en
perfumen que en comida y un antro de cultivos infecciosos que no se
puede calcular el daño que harían.
Por
lo visto, en este Ayuntamiento están más preocupados por ocultar
sus chanchullos, que por cuidar de la salud de sus habitantes.
Mario
R. Masjoán
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